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La tregua de ETA: mentiras, tópicos, esperanzas y propuestas

Polémicas

“Fue una barbaridad pretender matarlo”

“Fue una barbaridad pretender matarlo”

Víctimas, profesores, periodistas y políticos debaten en la cárcel de Nanclares con presos disidentes de ETA sobre el terrorismo y la paz. Los reclusos explican los talleres

Ética y autocrítica entre rejas

Mónica Ceberio Belaza

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró ayer que no habrá acercamientos de presos de ETA al País Vasco. El de Interior, Jorge Fernández, matizó por la tarde que la política penitenciaria es competencia de su departamento y que no habrá una “política” de acercamientos, pero que de forma individualizada se podrán tomar medidas. Es decir, insistió una vez más en la llamada vía Nanclares, establecida por el Gobierno socialista como único camino posible: conceder beneficios penitenciarios a aquellos penados que cumplan con los requisitos del Código Penal, rechacen la violencia y pidan perdón a las víctimas. Una solución que rechazan de plano tanto la izquierda abertzale como el colectivo oficial de presos de ETA, que confía en alguna salida que no les obligue a cuestionar su pasado y el uso de la violencia, algo que no parece que estén dispuestos a hacer.

 

Los reclusos disidentes de la banda recluidos en Nanclares de Oca (Álava), ahora trasladados a la nueva y cercana cárcel de Zaballa, y algunos en Basauri (Bizkaia) y Martutene (Gipuzkoa), son solo una veintena entre los más de 500 presos de la banda. Pero han hecho autocrítica —a la vez que una crítica hacia los excesos del Estado—, cumplido con las exigencias de la ley y, aunque se saben minoría, quieren participar en el proceso del final de la violencia.

Una decena, entre ellos Joseba Urrusolo Sistiaga, Rafael Caride o Idoia López Riaño, La Tigresa, participaron en octubre y noviembre de 2011 en una serie de talleres de debate dentro de la prisión con víctimas, profesores, políticos y periodistas para hablar sobre la violencia, las víctimas y la paz en Euskadi. Fueron los internos quienes solicitaron los talleres, y la anterior secretaría general de Instituciones Penitenciarias, dirigida por Mercedes Gallizo, los organizó con la colaboración de la oficina de víctimas del Gobierno vasco.

 

Un grupo de estos reclusos, autodenominados Presos Comprometidos con el Irreversible Proceso de Paz, casi todos en prisión desde los años 90 por condenas de decenas o centenares de años por asesinato o pertenencia a banda armada, accedieron a contestar, colectivamente, un cuestionario —centrado en los talleres— enviado por este diario.

 

Joseba Urrusolo Sistiaga, Carmen Gisasola, Kepa Pikabea, Andoni Alza, Ibon Etxezarreta y Rafael Caride, en nombre de todo el grupo, hablan de su necesidad de participar en debates y de lo que supuso reunirse con víctimas de ETA. Ante el periodista Gorka Landaburu, que sobrevivió a un atentado que le dejó mutilado de por vida, aseguran que se alegraron de que siguiera vivo, “que fue una barbaridad querer matarlo”.

Pregunta. ¿En qué consisten los talleres?

 

Respuesta. Son charlas-debate en torno a cómo afrontar una nueva convivencia basada en la reflexión crítica del pasado, la superación de las heridas tanto personales como sociales y nuestra aportación en este sentido.

 

P. ¿Por qué querían hacerlos?

 

R. Es evidente que la organización en la que nosotros militábamos ha sido responsable de una parte importante del sufrimiento vivido por muchas familias en todos estos años. Asumiendo esta responsabilidad, veíamos necesario tender puentes y crear espacios de encuentro que ayudaran, en lo posible, a cerrar las heridas, y aportaran algo a favor de una convivencia en paz y normalizada para que nunca más se vuelvan a vivir situaciones tan dramáticas y dolorosas. Nos parecía fundamental el contacto con personas de sectores y sensibilidades diferentes hablándonos, escuchándonos y rompiendo así el diálogo de sordos que ha existido en nuestro país durante tantos años.

 

P. ¿Qué tipo de cuestiones han abordado?

 

R. Lo que queda por hacer para recuperar una convivencia normalizada. Hemos analizado los procesos de memoria, verdad y reconciliación en otros países, las bases éticas para la construcción de la nueva convivencia, la realidad de las víctimas a través de sus propios sentimientos.

 

P. ¿Cómo fue la reunión con víctimas del terrorismo?

 

R. Fueron dos los encuentros, y resultaron especialmente intensos, positivos y constructivos. Le damos importancia al hecho de que participaran en el taller. Hemos podido escuchar sus miedos y dudas sobre que se quiera hacer un borrón y cuenta nueva, pasar página como si aquí no hubiera pasado nada, y lo entendemos. Creemos que el nuevo período que se abre en nuestro país con el fin de ETA debe construirse desde el reconocimiento del conjunto de la sociedad vasca de todas las víctimas de tantos años de violencia.

 

P. ¿Qué sintieron al tener a estas personas enfrente?

 

R. En el primer encuentro participaron los hijos de dos personas muertas en atentados [Jaime Arrese e Iñaki García Arrizabalaga]. Ver que estábamos en la misma sala y un grupo de presos hablando con ellos, escuchando cómo lo vivieron —no solo el atentado que costó la vida a sus padres, sino además la falta de solidaridad en su entorno, la reacción de la gente que encima dejaba de saludarles y añadían aún más dolor— hace que uno cuestione aún más no solo la utilización de la lucha armada, sino también la mentalidad que la rodeaba.

 

P. ¿Y en la segunda reunión?

 

R. Participó una víctima directa de ETA [Gorka Landaburu], que resultó gravemente herido, mutilado para toda su vida. Sientes que te alegras de que siga vivo, que fue una barbaridad pretender matarlo. Compartes en serio esos sentimientos, te emocionas estrechándole la mano. No puedes reparar el daño causado, no puedes volver atrás, pero a nivel humano sientes que estás aportando lo que puedes. Eso es lo que sientes.

 

P. ¿Los talleres han generado debates posteriores?

 

R. Claro. Hemos seguido dándole vueltas a los temas que se planteaban y cómo llevarlos a la práctica, cómo dar pasos concretos, cómo plantear una revisión crítica del pasado que vaya más allá de lo personal.

 

P. ¿A qué conclusiones han llegado?

 

R. La principal es que tenemos que seguir con este tipo de encuentros porque el contacto directo ayuda a afrontar de manera positiva estos temas cuando se tiene voluntad para ello. En nuestro país, la existencia de la violencia ha hecho que viviéramos en mundos estancos, llenos de prejuicios e ideas preestablecidas sobre lo que representaba “el otro”. El fin de la violencia tiene que traer consigo, entre otras cosas, un cambio de mentalidad. También pensamos que encuentros de estos, en los pueblos y en otros foros de reflexión, facilitarían superar muchos obstáculos para la convivencia.

 

P. ¿Qué pueden aportar estos talleres a la convivencia?

 

R. Aportan mucho en el terreno de lo concreto. Es como bajar a la realidad e ir más allá de las declaraciones o escritos. Nosotros queremos aportar nuestras reflexiones y testimonios porque pensamos que, desde nuestra propia experiencia, en primera persona y como grupo, nuestras reflexiones críticas de las decisiones que tomamos y de los procesos que las acompañaron ayudan a cuestionar la mentalidad con la que los objetivos políticos se ponen por encima de la dignidad de las personas.

 

P. El colectivo oficial de presos de ETA es absolutamente reacio a hacer autocrítica y a permitir en sus filas gestos hacia las víctimas. ¿Hay alguna posibilidad de que esta experiencia se extienda a otras prisiones?

 

R. Hay otros muchos presos que también participarían en este tipo de charlas-debate si se plantearan de forma adecuada. En Irlanda ya lo hacían; también salían de permiso para participar en actividades a favor del proceso de paz. Antes de empezar con los talleres, una de las primeras visitas que tuvimos fue la de Rafa Larreina, ahora diputado de Amaiur por EA, cuando EA aún no formaba parte de Bildu-Amaiur. Nos contó su experiencia de las reuniones con víctimas cuando formaba parte del Gobierno vasco. Nos hizo ver que el diálogo directo era posible. Compartimos con él la importancia de los pasos que estábamos dando y nos animó a seguir. Le comentamos lo importante que sería que él mismo fuera a hablar con presos en otras cárceles. Estaba de acuerdo. El problema es que el tema de los presos sigue bloqueado, y no solo por parte del Gobierno. Bastaría con que en la izquierda abertzale se tomara la decisión de desbloquearlo, como han hecho para legalizarse como grupo político. Con sensatez, como corresponde al momento que vivimos. Sin retrasar más los pasos a dar.

 

P. Muchas víctimas no creen que la autocrítica sea sincera. La ven como algo instrumental para acceder a beneficios penitenciarios. ¿Qué les dirían?

 

R. Entendemos que puedan existir este tipo de recelos, pero les diríamos que en nuestro caso llevamos muchos años de crítica, autocrítica y cuestionando a nivel interno todos estos temas. Han sido años de discusiones y problemas constantes con un coste personal y para nuestro entorno familiar que no es fácil de llevar. Nos podíamos haber limitado a dejarlo, a distanciarnos discretamente y buscar nuestra salida personal dentro de las posibilidades que se establecen en la ley. Esta es la opción que hubieran querido que tomáramos los que hablan en nombre de los presos. Pero no lo hemos hecho porque pensamos que nuestra responsabilidad nos lleva al compromiso de aportar lo que podamos en este sentido. Esta es una de las conclusiones que han podido sacar los que han venido a participar en los encuentros del taller.

 

http://politica.elpais.com/politica/2012/02/07/actualidad/1328646465_063852.html

Más de 400 víctimas del terrorismo piden a la Fiscalía General del Estado que ordene la detención inmediata de Josu Ternera

Más de 400 víctimas del terrorismo piden  a la Fiscalía General del Estado que ordene la detención inmediata de Josu Ternera

El lunes 6 de febrero, a las 13 horas, la asociación Voces Contra el Terrorismo, la cual representa a casi medio millar de víctimas del terrorismo, presentará un escrito ante la Fiscalía General del Estado para solicitar la inmediata detención de Josu Ternera y su puesta a disposición de la justicia española.
 
El terrorista se encuentra en busca y captura desde el año 2002. Sin embargo, eso no le ha impedido reunirse en diversas ocasiones con el Presidente del PSE, Jesús Eguiguren, en ciudades como Oslo o Ginebra, y pasearse impunemente por varias naciones europeas con una más que sospechosa tranquilidad sin que jamás haya sido detenido. Por eso, VCT confía en que, tras el cambio de Gobierno, la despolitización de la justicia sea, por fin, una realidad y que, por tanto, el Ministerio Público cumpla y haga cumplir la ley.
 
Josu Ternera está imputado como autor intelectual del atentado cometido contra el Cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza en el año 1987. Un atentado en el que fueron asesinadas 11 personas, entre ellas 6 niños.
 
Homenaje a las víctimas del atentado de la Plaza de la Cruz Verde
 
Antes de presentar el escrito ante la Fiscalía, el Presidente de Voces Contra el Terrorismo, Francisco José Alcaraz, acudirá a los actos en recuerdo de las víctimas del atentado de la Plaza de la Cruz Verde de Madrid, del que se cumplen 20 años.
 
A las 10:30 horas, tendrá lugar una misa en la Iglesia Arzobispal Castrense de Madrid, sita en la calle Sacramento, número 11, con el fin de mantener viva la memoria de todas las personas vilmente asesinadas. Posteriormente, los familiares de las víctimas llevarán a cabo una ofrenda floral en el lugar del atentado.
 
Los hechos se remontan al 6 de febrero de 1992, cuando ETA hizo estallar un coche bomba al paso de una furgoneta militar a la altura de la plaza madrileña. Como resultado de este terrible atentado, cinco personas fueron asesinadas y más de una docena resultaron heridas.
Presentación del escrito ante la FGE
 
Fecha:
6 de febrero de 2012
Lugar: Fiscalía General del Estado
Dirección: C/ Fortuny, 4, Madrid
Hora: 13:00 horas
Misa por las víctimas del atentado de la Plaza de la Cruz Verde
Fecha:
6 de febrero de 2012
Lugar: Iglesia Arzobispal Castrense de Madrid
Dirección: C/ Sacramento, 11, Madrid
Hora: 10:30 horas

La Reinserción individualizada; ETA gana (SEVILLA NUESTRA; por Javier Cortes Lucena)

La Reinserción individualizada; ETA gana  (SEVILLA NUESTRA; por Javier Cortes Lucena)

 

Triste y lamentable pero como muchos ya sospechábamos la negociación con ETA ha sido cosa de tres, no sólo de ZP y Otegui.

 

Primero fue humillante comprobar como en el debate televisado entre Rajoy y Zapatero no se habló ni de terrorismo ni de corrupción. Muchos teníamos esperanzas en que el nuevo gobierno entrante supondría un antes y un después en lo que a materia antiterrorista se refiere, pero por desgracia no está siendo así, o al menos tanto como debiera.

 

Hay que reconocer que se están planteando reformas interesantes para la justicia, la estabilidad presupuestaria, la reforma del mercado laboral o la responsabilidad penal para aquellos políticos que nos lleven a la quiebra. Pero como siempre la derecha sólo se dedica a gestionar al país desde un punto de vista económico olvidando la importancia de apartar a quienes usan nuestras leyes para debilitarnos como nación.

 

Encubrir una "Amnistía Parcial" como "Reinserción Individualizada" supone poner en bandeja a los asesinos una victoria que los defensores del Estado de Derecho no podemos tolerar. Perfecto que gestionemos España teniendo en cuenta su economía, su capacidad productiva, su riqueza y sus rentas más altas, pero cometemos un grave error si dejamos en un segundo plano asuntos de estado tan importantes como dejar que, los enemigos de España y la libertad, puedan seguir expoliando y dilapidando nuestro futuro.

 

El PP se equivoca si considera que lo mejor es apartar a los llamados sangilistas, ellos mejor que nadie han entendido la importancia de una derrota no sólo de ETA sino de quienes recogieron sus frutos. Antes idolatrados y ahora ninguneados, como si de simples proscritos se tratara, han tenido que soportar, como Santiago Abascal, la humillación pública de tener que renunciar a su acta como diputado en el País Vasco para que la dirección del partido aceptara el nombramiento de Carlos Urquijo como delegado del gobierno.

 

No me gusta nada este tipo de situaciones y mucho me temo que deben estar relacionadas con la falta de interés que el Ayuntamiento de Sevilla está mostrando para la realización de un monumento a las víctimas del terrorismo que desde el pasado 12 de Octubre empezó a reivindicar y promover Foro Sevilla Nuestra.

 

El Semanal Digital, 2/02/12

ALCARAZ CONTESTA EN ESRADIO: Amaiur y los suyos pidieron acabar con las políticas de "AVT's y Alcaraces"

ALCARAZ CONTESTA EN ESRADIO: Amaiur y los suyos pidieron acabar con las políticas de "AVT's y Alcaraces"

El presidente de VcT denuncia la impunidad de quienes pidieron la libertad de Otegi y dijo que si el PP no ha cedido es por la acción de las víctimas.

El sábado, alrededor de 150 personas se concentraron frente a la cárcel de Logroño para reclamar la puesta en libertad del batasuno Arnaldo Otegi. En el acto, los simpatizantes de Otegi desplegaron pancartas en las que se hablaba de "políticas de vencedores y vencidos, de AVTs y Alcaraces".

 

Francisco José Alcaraz ha contestado en Sin Complejos de esRadio a estas ofensas, que ponen, dijo, "en la diana" a él y a su familia, y ha considerado que la presión al PP en realidad no viene sólo de los proetarras, sino también de los "nacionalistas y el propio partido socialista". Citó a Patxi López como principal representante de la petición de acercar al País Vasco a presos etarras.

 

Alcaraz quiso recordar que, en estas circunstancias, "la única acusación popular en el caso Bateragune ha sido Voces contra el Terrorismo", en un proceso ahora mismo en el Supremo "pendiente de sentencia". "Espero que el Supremo no se deje llevar por presiones políticas,  que van a ser muchas, tal y como anuncia el entorno proetarra".

 

Preguntado en Sin Complejos sobre las posibles medidas del Ejecutivo de Rajoy, el presidente de Voces contra el Terrorismo señaló unas palabras de Otegi sobre el proceso. El exportavoz de Batasuna piensa que los populares "van a ceder a los beneficios del entorno proetarra y socialista". "Ellos tienen total confianza de que va a ser así, y si el PP no lo ha hecho es por la presión de las víctimas".

 

No obstante, aseguró, no puede "valorar lo que piensa hacer o dejar de hacer el PP porque no se han puesto en contacto con nosotros. No tenemos ninguna información. Dicho eso, tienen que tener presente que la rebelión cívica que impulsamos se va a mantener viva". Alcaraz consideró a este respecto como "prioritaria" la disolución de Amaiur y Bildu, y la detención del etarra Josu Ternera.

 

El presidente de Voces contra el Terrorismo emplazó a la formalización del cargo del nuevo Fiscal General del Estado , Eduardo Torres-Dulce. Alcaraz aseguró estar "esperando para pedir medidas, no para presionar, y para exigir justicia" contra la impunidad de etarras como Josu Ternera.

 

Por último, Francisco José Alcaraz puso como ejemplo el caso del juicio contra los agresores a Santiago Abascal y otros representantes del PP en Llodio, que tuvo lugar esta semana. "No se ha hecho absolutamente nada" contra lo que calificó como una clara "impunidad" hacia la clase política que "nos deja a todos decepcionados".

 

"Mientras ellos tengan esperanza tenemos motivo para estar preocupados", dijo en Sin Complejos de esRadio.

Libertad Digital, 29/01/12

En memoria de Gregorio Ordóñez. Un legado más necesario que nunca. Por Jaime Mayor Oreja

En memoria de Gregorio Ordóñez. Un legado más necesario que nunca. Por Jaime Mayor Oreja

No hay, ni habrá, arrepentimiento. Hay solo una vía distinta, la de la política, para alcanzar la meta de siempre: la ruptura

Gregorio Ordóñez, esencialmente, como un hombre abrazado a la fortaleza de la verdad. No era fácil hablar sin pelos en la lengua en el País Vasco, en una época dominada por el miedo; un miedo impuesto por los que acabarían matándole; miedo que él les hizo sentir diciendo la verdad, precisamente allí donde era más peligroso decirla. Para mí, Gregorio Ordóñez fue el hombre que se atrevió a contar la verdad con un lenguaje directo y sin miedo.

 

Diecisiete años después, su legado, el legado de la verdad y el valor de decirla, es más necesario que nunca.

 

ETA está a dos pasos de culminar la toma del poder en el País Vasco. Este ha sido el sentido de su negociación con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. El primer paso es la excarcelación de Arnaldo Otegi; el siguiente, su investidura como lehendakari. La banda terrorista decidió hace tiempo que debía legitimarse desde el poder para forzar al Estado a un proceso de autodeterminación.

 

No hay, ni habrá, un arrepentimiento. No hay, ni habrá, una condena de la violencia. Hay solo una vía distinta, la vía de la política, para alcanzar la meta de siempre: la ruptura. El proceso de negociación, irresponsablemente impulsado por Zapatero, ha permitido a ETA instalarse en ayuntamientos y asambleas. Su próximo objetivo es ver a Otegi investido como Lehendakari. La banda terrorista sabe que, en el País Vasco, ya solo tiene un rival, que es el PNV. A diferencia del PNV, ETA podrá presentar un candidato de los tres territorios del País Vasco. Una vez alcanzada la Lehendakaritza, la presión al Gobierno de España será permanente para que active un proceso de autodeterminación. ETA contará con aliados o “mediadores” en el escenario internacional, que intentarán convencer al Estado español de la conveniencia de ceder. No les faltarán los precedentes: Kosovo o, más recientemente, la desafortunada decisión del Gobierno de David Cameron de ir hacia un referéndum de autodeterminación en Escocia. Por muy distintos que sean los casos del País Vasco y los de Escocia e Irlanda, ETA habrá alcanzado el poder y podrá presionar al Gobierno invocando estos precedentes y contando con el respaldo de voces políticas internacionales.

 

La memoria de Gregorio Ordóñez nos obliga a explicar lo que significa este desafío. Del proceso iniciado por Zapatero, lo que le queda a ETA es la excarcelación de Otegi y que este sea el candidato que no tiene el PNV. El camino hacia la ruptura pasaba por la legitimación del terrorismo y por la posibilidad de alcanzar el poder. Esta es la herencia envenenada que Zapatero ha dejado a España.

 

Creo que recordar con fidelidad a Gregorio Ordóñez exige decir la verdad, como él lo habría dicho.

 

Jaime Mayor Oreja, ex ministro de Interior (1996-2001) y, actualmente, miembro de la Dirección Nacional del PP y diputado en el Parlamento Europeo.

Libertad Digital, 23/01/12

Ruta Norte: Basagoiti sabe que Rajoy no puede negociar con ETA sin rendición

Ruta Norte: Basagoiti sabe que Rajoy no puede negociar con ETA sin rendición

No basta que ETA no actúe o se desarme: sólo su rendición y la renuncia a todo objetivo político pueden hacer que el Estado sea benévolo con criminales no asesinos. Y correr es malo. 

 

Antonio Basagoiti ha declarado a El Correo que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, consultará de inmediato y profundamente con el PSOE y el PNV "qué pasos se pueden dar en el final de ETA". Se advierten en el presidente del Partido Popular vasco muchas sensaciones e intenciones sin duda positivas: el deseo de que la "tregua" de los criminales se convierta en verdadera paz, la voluntad de que su región viva una normalidad democrática que a diferencia del resto de España jamás ha conocido y, qué duda cabe, la intención de que su partido, de la mano de los herederos de Sabino Arana y de Pablo Iglesias sea decisivo en el futuro político de esa región a la que ahora hasta parte del PP llama con el nombre abertzale de Euskadi.

 

Ojalá tenga suerte en lo que de bueno intente el presidente popular. Ha de recordar, ciertamente, que el PP gobierna España con mayoría absoluta, y por ende con responsabilidad absoluta en lo bueno y en lo malo, mientras que PNV y PSOE tienen sus propios objetivos, el cumplimiento de sus propias metas antes que el bien de una nación que no confía en ellos o que directamente quieren destruir los jeltzales, aunque hayan ido al colegio y a la piscina con nosotros. Ser de centro, suave, moderado, prudente, maquiavélico, político, lo que se quiera ser, no es –ni puede ser- olvidar que hay límites infranqueables, y que por otro lado hay pasos, entre los que todo abertzale considera esenciales, que un gobernante español no puede dar. El camino directo hacia la paz es la derrota absoluta del nacionalismo armado, y probablemente sólo los siete años de Zapatero hayan impedido ese fin. Otro camino hacia la paz es el de la rendición incondicional del mismo nacionalismo, a la que podrán seguir muy limitadas medidas de gracia, singulares y personalísimas, para algunos criminales menores. Y en ese camino no puede haber cambio político alguno que no sea en provecho de la nación y del Estado, de modo que, estando de partida excluida toda entrega de Navarra, toda amnistía de verdugos y toda ulterior fragmentación de España, lo único negociable es el tiempo y la forma de la entrega de las armas y de los delincuentes.

 

A menos que una de las dos partes olvidase su propia naturaleza y diese por buena la visión de la jugada del interlocutor. Con Urkullu, con Zabaleta y por supuesto con cualquier otro batasuno, aunque se brinde y se trate, no es fácil negociar si uno olvida qué son y qué quieren, o si ellos no renuncian finalmente a sus metas. Antonio Basagoiti tiene la suerte, además de tener el respaldo de un Gobierno cuyo electorado es muy sensible en estos asuntos, de que Mariano Rajoy puede consultar opiniones técnicas cualificadas que aclararán cualquier duda que pueda quedar ante el "proceso" y sus muros. De particular interés es la dada por el escritor Fernando José Vaquero Oroquieta en su reciente libro La ruta del odio. 100 respuestas claves sobre el terrorismo, y resumida hace muy poco en una entrevista en La Cámara.

 

¿Qué referentes habría que seguir para avanzar en un camino hacia la paz? ¿Qué gobiernos, gobernantes y países son un ejemplo?

 

"La inmensa mayoría de grupos terroristas han sido derrotados a lo largo de la Historia. Pero no siempre desde el respeto de los derechos humanos. Por ello, acaso un ejemplo modélico sea el británico en la actualidad. También ejecutó la guerra sucia, pero el proceso de paz norirlandés se ha afianzado cuando el IRA comprendió que no podía vencer y los británicos, controlando todo el proceso, pues llegaron a suspender la autonomía de Irlanda del Norte, les abrieron las puertas de la política, una vez optaron decididamente por la paz. Es decir: primero, abandono de las armas, después, política; no al revés. Pero, ojo, no caigamos en el simplismo de buscar paralelismos. Ni Irlanda es Euskadi, ni Irlanda del Norte es Navarra, ni el Reino Unido es España. España sin el País Vasco y/o Navarra es inconcebible".

 

¿Cuál es la razón de que ETA se haya mantenido tantos años?

 

"En buena medida, gracias a méritos propios: voluntarismo, trabajo sectorial, diversificación. Supieron crear una contrasociedad en la que puede vivirse, de modo atractivo y global, durante las 24 horas del día y los 365 días del año. Pero también gracias a claudicaciones ajenas, falta de perspectiva y [falta de] audacia de los partidos democráticos en los sucesivos gobiernos de Madrid. Y, por último, gracias al oxígeno de ciertas izquierdas simpatizantes con buena parte de sus presupuestos; por no hablar del juego sucio e inmoral del PNV".

 

¿Qué opinión le merece el alto el fuego "permanente, general y verificable" de ETA?

 

"Van en serio. En imposible una vuelta atrás. Aunque es un cambio táctico y no estratégico: persiguen la independencia y el socialismo a medio plazo y están convencidos de que pueden alcanzarlos. Pero me escandaliza la falta de información por parte del Gobierno y de los grandes partidos democráticos. Es indudable que se viene negociando. Algo empieza a saberse gracias a Eguiguren y, triste es decirlo, al Gara. Pero me repugna ese interés de los políticos en tratarnos a los ciudadanos como menores de edad. No nos informan, no cuentan con una ciudadanía que ha demostrado una madurez impresionante. Los ciudadanos han puesto los muertos, el sufrimiento de numerosos colectivos, la movilización social cuando flaqueaban los políticos… antes o después nos enteraremos de muchas cosas. En suma, es inconcebible que ETA haya dado esos pasos, aparentemente irreversibles, sin contar con unas garantías de la "otra" parte. No nos han contado de la misa ni media".

 

¿Qué pasos debería dar ahora ETA? ¿Y la izquierda abertzale?

 

"Si de verdad quieren integrarse en el juego democrático, en primer lugar: disolver ETA definitivamente, entregando las armas, poniéndose a disposición de la Justicia. Y pedir perdón: no basta con equiparar el sufrimiento de las supuestas víctimas de "todas" las violencias. La equidistancia moral entre víctimas y verdugos es uno de los comportamientos que más repugna a una conciencia ética".

 

¿Cómo cree que va a afectar la presencia de Amaiur en el Congreso y en el País Vasco?

 

"En el Congreso, será un foco permanente de atención. Se apuntarán a cuantas propuestas rupturistas con el actual estado de cosas propicien otras formaciones. En el País Vasco, avanzarán en doble dirección: la construcción nacional y la toma de control del conjunto del nacionalismo vasco. Tenemos "cuestión vasca" hasta hartar"…

 

¿Ve una situación similar con Bildu en Navarra?

 

"No, al menos a medio plazo. Pero aquí también trabajarán para seguir avanzando. Son la más potente comunidad social en movimiento que actúa en Navarra. No hay nada enfrente atractivo que se les oponga. Así, seguirán ganando voluntades y ello se traducirá en más votos, convocatoria tras convocatoria; aunque sea poquito a poco. Y si un día otras fuerzas políticas se muestran propicias (PSOE, Geroa Bai, Izquierda Unida), buscarán el relevo de UPN del Gobierno de Navarra. Lo intentaron hace 4 años con el PSOE y no lo consiguieron. Pero no tienen más remedio que seguir intentándolo. Y lo harán. Saben lo que quieren y cómo lo quieren".

 

¿Bildu y Amaiur son ETA? ¿Deben tomarse medidas para la ilegalización de estos partidos?

 

"Todos forman parte de la misma cebolla: son capas del mismo producto. Cuanto más próxima al núcleo se sitúe, más ETA será. Si queremos una democracia fuerte y libre, hasta que ETA no desaparezca definitivamente, en todos sus "aparatos" y con todas sus consecuencias, la disolución de sus brazos políticos es una buena opción para hacerles entrar en razón… democrática. Pero "democracia" al estilo occidental; no en el de popular o revolucionaria".

 

Los dos partidos fuertes de España, PSOE y PP, han intentado negociar con ETA ¿Cree que ha sido un error?

 

"Si negocias, les reconoces como un interlocutor equiparable. ¿Cómo equiparar un Estado democrático con una banda de criminales? No se debe negociar. Otra cosa es hablar. Era necesario hacerlo, al objeto de conocer el estado real de la banda y actuar en consecuencia. Pero negociar, ¿qué? Deben rendirse, entregar las armas, en primer lugar. Entonces, se les puede abrir las puertas de la política: no al revés. Esa inversión demuestra poca voluntad, escaso conocimiento de los mecanismos mentales terroristas, templados a base de dogmas militaristas, tácticas oportunistas y estrategias marxistas. Para forzar a una banda al desarme, es precisa una voluntad de hierro: firmeza. Unas ideas muy claras. Una seguridad inmensa en el propio potencial. De carecerse lo anterior, si se dialoga o negocia desde la inseguridad y la debilidad, se proporcionan bazas a los terroristas y sus amigos, más seguros y determinados, que sabrán aprovechar". 

 

Pascual Tamburri

Ruta norte

El Semanal Digital, 10/01/12

Rajoy y la verdad

Rajoy y la verdad

Existe una convención política que otorga a todo gobierno cien días de gracia desde su toma de posesión. Y le juro o prometo, como quiera el lector, que tenía pensado sumarme. Pero Rajoy ha comenzado la andadura metiendo con desahogo el dedito en el ojo. Total, vayan al demonio los cien días de marras. En su primer día y sin anestesia el nuevo ministro del Interior, es decir, Mariano Rajoy, se ha ocupado de dejar estomagantemente claro que avala la "ejemplar" tarea llevada a cabo por sus antecesores Camacho y Rubalcaba. Así, además de tomarnos el pelo, desmentía al diputado popular Gil Lázaro, que se ha pasado no sé cuántas sesiones en el Congreso preguntando al ejemplarísimo Rubalcaba sobre la responsabilidad del gobierno ZP en el chivatazo del Faisán. ¿Gil Lázaro a las órdenes de Sáenz de Santamaría, a su vez a las órdenes de Rajoy, ha estado protagonizando un teatrillo, tal vez una coartada? Esta loa lamentable de Fernández Díaz hacia la gestión negociante con la ETA de Rubalcaba y ZP, hacia la mentira indecente, chirría en la misma frecuencia sonora que lo dicho por Rajoy el día del comunicado etarra de "cese definitivo", asunto pactado y previamente remunerado con el precio de la vuelta de la banda a las instituciones, la conferencia de Ayete, vamos, con la legitimación. El gallego, sin necesidad aparente, echó la pata pa´lante y destacó que tal comunicado había llegado sin pagar precio a la banda. A mi entender, mintiendo por toda la barba. Probablemente algo le iba en ello.

 

Pienso que desde que en 2008 el PP perdiera las elecciones y, en nefasta consecuencia, Rajoy acordara pactar secretamente con ZP en el asunto terrorista, hemos asistido a una gran gira teatral. Con representaciones también en Navarra a modo de bocata, toda vez que el gobierno de Sanz quedó necesariamente entre pan y pan. El pan del socio socialista en Navarra y el pan de la aquiescencia rajoyesca en Madrid. Me afirmo en mis sospechas y me caben pocas dudas de que en la segunda legislatura socialista todo lo ocurrido entre la banda y el Gobierno ha sido bendecido por Rajoy, con el inquietante Federico Trillo al aparato, en íntima y continua comandita con Rubalcaba. Lo demás, las declaraciones campanudas, la asistencia discreta a alguna manifestación en contra de la legalización de BILDU, la tolerancia con Mayor, casi la única voz discordante en el PP, etc., pose y teatro. Es significativa la insistencia del nuevo presidente y de su ministro en aquello de que "esperan" de la banda su disolución. Esperadores del terror. Esperan respuesta como consecuencia y devolución de algo. Y en ello, en sus palabras, nos incluyen a todos los españoles como si todos estuviéramos en el engaño, en las verdaderas claves de su guiso con ZP. Les agradecería que no me mezclen en tal bazofia. Yo no espero nada de una banda de asesinos. Ni debo. Porque soy un ciudadano y como tal espero de mi Gobierno que los enchirone, que aplique el Estado de Derecho. Punto.

 

Ustedes y los ejemplares antecesores Camacho y Rubalcaba, nos han dicho que la ETA está derrotada y que son cuatro gatos. Y que no les deben nada. Pues señor Fernández Díaz y señor Rajoy, si eso es así déjense de jugar con las palabras, de herir con sus palabras y empiecen ya mismo por poner los grillos al asesino en serie y negociador en el proceso Josu Ternera, cuyo paradero nada le ha importado al Partido Popular a pesar de las noticias de que nuestros servicios de inteligencia lo tienen más localizado que a la Catedral de Pamplona. Resumiendo, enmienden ocultaciones y falsedades. El nuevo presidente designó a la verdad como una de las guías del Gobierno. Me alegro y se lo demando. Conque nada, estrénense.

 

Salvador Ulayar es hijo de Jesús Ulayar, víctima del terrorismo.

 

Libertad Digital, 29/12/11

Regeneración democrática, desarme y “tierra quemada”

Regeneración democrática, desarme y “tierra quemada”

 

            Al igual que en anteriores convocatorias electorales de nuestra –ya no tan joven- democracia española, ETA capitalizó, en el contexto del pasado 20-N, la atención mediática, con un calculado movimiento táctico; en esta ocasión, una de sus frecuentes, carnavalescas, anónimas y encapuchadas entrevistas. Lo que debiera entenderse como una patología colectiva, inaceptable en cualquier sociedad avanzada, se ha convertido en una pseudotradición: el incómodo asistente no invitado a tan esperado convite. Una de entre tantas otras modalidades de presencia terrorista en nuestro paisaje, pese a su antidemocrática capacidad de distorsión.

            No obstante, de modo inquietante pero no por ello menos esperado, ello redundó además en unos magníficos réditos electorales, aproximando con pasos de gigante a Amaiur, brazo político del engendro, a su objetivo de siempre: el liderazgo del conjunto del nacionalismo vasco y, simultáneamente, el avance en sus posiciones rupturistas con el Estado español. Y con una mirada fija y una férrea voluntad planeando a medio plazo.

            Pero hay que subrayar un factor incómodamente novedoso en este escenario: han plantado, de semejante modo, un jalón más de ese denominado proceso de paz que, pese a su naturaleza esotérica e inédita para la inmensa mayoría de los mortales, y siguiendo el modelo irlandés, han aplicado Josu Ternera, Arnaldo Otegi y compañía, con el beneplácito cegato y arcangélico de los mal llamados mediadores internacionales y el colaboracionismo –explícito o implícito, algún día se sabrá aunque sea por Gara- del PSE/PSOE.

            Como guinda de tan voluptuoso e indigesto pastel, además de las tópicas invocaciones a la paz y a las víctimas, no han sido pocos los políticos y agentes mediáticos que han apelado a la necesaria regeneración democrática, a la pacificación y a la normalización; como supuestos objetivos últimos de tamaño despropósito.

            Pero, ¿cómo normalizar una sociedad que ha sido amputada de una parte sustancial de sí misma? Es elemental, pero hay que preguntarse, más allá de cansinos y comodones tópicos biempensantes, ¿cómo fortalecer la moral democrática? La moral, ¿de quién? Y, ¿por quienes? ¿Acaso de la mano de los antaño terroristas y sus apoyos?

            No nos equivoquemos: la izquierda abertzale no es democrática, en el sentido literal de tan respetable, liberal y occidental concepto: ni en sus prácticas, ni en sus convicciones. Por el contrario, deviene totalitaria y excluyente, lo que arrastra una desorbitada dimensión cultural, social e individual. Y la democracia –seamos claros- le es indiferente: únicamente un medio para la conquista de tan grandioso fin, el que de verdad le mueve; la construcción nacional vasca.

            Tales invocaciones a la moral democrática y a la normalización, por mucho que se reivindique un desarme de la banda terrorista ETA sin contrapartidas, son meros ejercicios de retórica. No es posible regenerar nada entre quienes no tienen interés alguno en ello o, más bien, todo lo contrario.

            Una premisa. A lo largo de estas décadas, no sólo han sido los sectores de la autodenominada izquierda abertzale los que se han excluido voluntaria y voluntariosamente de la normalidad democrática, sino toda una generación de jóvenes, educada y abducida en los contravalores destilados desde las laboriosas factorías socioculturales del comunitarismo nacionalista excluyente.

            No puede ser de otra manera. Para regenerar, en primer término, hay que contar con un cuerpo social susceptible de tan magno empeño; lo que exige una siembra paciente entre las carnes de la sociedad vasca y navarra, un cambio individual, impulsado de sujeto a sujeto, con nombres y apellidos, con la persona como protagonista, manchándose sus operarios con el barro de la historia y la sangre de la vida. En suma, lo que en términos políticos, sin complejos, significa una contrarrevolución cultural compensatoria, e incluso antagonista, de la revolución existencial desarrollada sistemáticamente, desde hace décadas, por el panvasquismo.

            En amplios territorios y espacios colectivos del País Vasco y Navarra impera la ley de la exclusión. Los elementos constitucionalistas más relevantes, o simplemente no nacionalistas, fueron asesinados en una sorda sangría tapada con el abyecto “algo habrán hecho”. Otros emigraron en un exilio callado. Los indiferentes se amoldaron al nuevo modus vivendi de los verdugos; y sus hijos se educaron en las quintaesencias nacionalistas, en cualquiera de sus convergentes versiones. La homogeneización nacionalista se impuso. Por el contrario, las otras perspectivas existenciales retrocedieron hasta casi desaparecer; una mutación social espoleada por el recambio generacional y el obligado exilio interior o exterior. Hoy día, ignorando cínicamente tal realidad, son muchos los que han proclamado que “¡ahora todos han podido votar en libertad!”. Seguro, sobre todo los muertos y los exiliados…

            Desarme, pacificación, normalización, ¡regeneración…! Casi nada, sobre todo tras décadas de ejecución implacable de una táctica de “tierra quemada”, liberándola de los discrepantes, por parte de terroristas y adláteres. Extraordinaria empresa, por tanto, que se antoja nada sencilla: ¿cómo hacerlo?, ¿desde dónde?, ¿para quién?, ¿por quién?

            Si se pretende ir más allá de la retórica, persiguiendo un verdadero cambio social que sustente a una acosada nación española, se impone una perspectiva omnicomprensiva y a largo plazo, por medio de una ambiciosa lucha cultural intrincada en una alternativa atractiva frente a los nacionalismos agresores. Pero, los posibles actores de tal empeño, ¿están dando la talla? Mucho tememos que la respuesta sea negativa. Así, no es precipitado afirmar que Patxi López ha desperdiciado una ocasión de oro; no en vano desde la Jefatura del Gobierno Vasco disponía de medios materiales importantes para emprender esa batalla por el cambio de mentalidades que ya iniciara –en los años de plomo- el movimiento cívico constitucionalista y pacifista vasco. Una epopeya de trasfondo cultural, ético y metapolítico cuyo patrimonio se está dilapidando por intereses políticos cortoplacistas, cuando no simplemente ocultos.

            Decaído y casi anulado tal movimiento, Patxi López y los suyos han eludido esa batalla tan necesaria como legítima. Les ha faltado altura de miras, medios humanos tal vez; en cualquier caso, la necesaria voluntad imprescindible para tan ambicioso proyecto. Seguramente, sus servidumbres ideológicas y sus compromisos políticos les han anulado para tal envite; si es que alguna vez se lo propusieron con la dolorosa lucidez que ello exige.

            Finalmente situado en inexcusable primera línea de la responsabilidad nacional, el Partido Popular viene afirmando, por activa y por pasiva, que los imperativos de la recuperación económica serán su prioridad. Pero, pensamos, que tal determinación no puede ignorar la inevitable confrontación política, en sus nuevas expresiones, que se avecina.

            En esa ineludible empresa por la verdadera regeneración democrática, el Gobierno de Madrid, y la mayoría parlamentaria que lo sustenta, tendrán que responder sin excusas al reto del nacionalismo radical: su presencia en las instituciones, la pervivencia larvada –o mutada- de ETA, sus previsibles desaires cotidianos, sus seguros desafíos rupturistas, su irrenunciable avance social… Semejante herencia envenenada, de no pocas cláusulas acaso inéditas o imprevisibles, deberá ser desbrozada por el Partido Popular; y sin el aval del antaño filón de la tradición socialista vasca, ni la de su agónico Gobierno Vasco en retirada.

            Más allá de tan repetidas como inútiles recetas parciales, ya no sirven las improvisaciones. Ni los atajos. Ni los simplismos. Basta ya de tópicos autocomplacientes, excusas tranquilizadoras, cobardías encubiertas. No queda tiempo. Ya no.

 

Diario Liberal, 2/12/11

Fernando José Vaquero Oroquieta