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La tregua de ETA: mentiras, tópicos, esperanzas y propuestas

Mayor Oreja: “Estamos ante la trampa para la autodeterminación”

En la mañana de este lunes se presentaba en la casa de América un libro sobre las incertidumbres en torno al alto el fuego de ETA editado Grafite y escrito al alimón entre el Foro El Salvador y la revista Arbil. En el acto de presentación el ex ministro del interior, Jaime Mayor Oreja, ha rehusado calificar el alto el fuego de “tregua trampa” para tacharlo de “trampa para la autodeterminación”. Preguntado sobre la actitud que debería mantener el PP en el pacto antiterrorista y Debate sobre el estado de la Nación, el ex ministro ha señalado que el PP debería “verificar al Gobierno”. Y es que Mayor Oreja considera que ETA ya ha sido “verificada” y ha demostrado que no puede cambiar. En definitiva, el ex ministro no observa voluntad alguna por parte de ETA de abandonar las armas. Además, mayor oreja ha vinculado la tregua de ETA al estatuto de autonomía y al ‘pacto de Perpignan’ y ha censurado que el Gobierno quiera “trocear” la realidad para camuflarla a los ciudadanos.

Según Mayor Oreja, los puntos del proceso son los siguientes: legalización de ETA, autodeterminación del País Vasco y supuesto gobierno de progreso para Navarra. Por eso ha censurado que no se quiera escuchar a quienes se muestran escépticos ante el mal llamado proceso de paz y ha responsabilizado al Gobierno del apagón informativo. Como respuesta, Mayor Oreja propone que quienes se quieran oponer al proceso deberán oponerse a ZP en su conjunto.

Por otra parte, el presidente del Foro El Salvador, el Padre Jaime Larrínaga, ex párroco de Maruri, ha señalado durante el acto de presentación del libro que a su juicio el último documento de la Conferencia Episcopal sobre el terrorismo es lo mejor que se ha escrito sobre esta materia, aunque ha lamentado que el citado documento haya quedado en el cajón.

Por último, el director de la editorial Grafite, José Antonio Herrero, ha señalado que no estamos en ninguna guerra y que por tanto no hay proceso de paz: “una parte mata a otra”. Se ha preguntado, por tanto, quién ofrece libertad y seguridad: “¿Qué gobierno negociaría con violadores si estos anunciasen su intención de dejar de violar?”. Esa es la pregunta.

Hispanidad.com, 29 de mayo de 2006

(http://www.hispanidad.com/noticia.aspx?ID=12281)

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